viernes, 9 de enero de 2009

Ferrán Adrià y El Bulli

Hace poco escribí un reportaje sobre Adrià y su restaurante de culto o taller de creación o como quiera llamarse... lo escribí además sin saber que es como escribimos los periodistas que evidentemente no podemos ser especialistas en todo, eso sí, lo hice con buenas intenciones y de forma concienzuda estudié para la ocasión.
De gastronomía no aprendí mucho pero detrás de todas las crónicas y críticas volví a descubrir al españolito que parece que le sienta mal que tengamos algo bueno y reconocido a nivel internacional. Descubrí de nuevo aquello de que nadie es profeta en su tierra y no lo entiendo. Adrià no reniega del bocata de tortilla pero investiga nuevas vías. Cierto es que de momento nadie va a cocinar con nitrógeno líquido en su casa pero... igual que nadie se pone un diseño de pasarela para ir a comprar el pan o del mismo modo que cuando escribes una carta no dejas de poner puntos y aparte y no se escribe como José Saramago.
¿Por qué no reconocer que algo bueno debe estar haciendo Ferrán Adrià? Que mal nos sienta que alguien abra nuevas vías de investigación y creación. Asín somos. Spain is diferent.